martes, 1 de septiembre de 2009

Licitud en España

¿Hasta dónde llega la vida pública y hasta donde puede llegar a empezar la privada en la clase política en general y familia real en particular?.

Hasta ahora existe una ley de incompatibilidades que no permiten a ningún diputado, consejero, concejal o edil ejercer ninguna actividad privada mientras lo esté haciendo en la pública (por lo menos de forma legal, vease Gürtel). Ahora bien, ¿es lícito que un ex-consejero, ex-ministro o ex-diputado (éste en menor medida) una vez acabada su tarea en la administración pase a una empresa privada cualesquiera con los contactos y agenda de clientes que puede llevar de su anterior etapa?. Aparentemente sí, vease Jordi Sevilla (hoy mísmo lo ha comunicado), ex-ministro de Administraciones Públicas o Eduardo Zaplana, ex-ministro de nada pero ex-ministro y ex-presidente de la Comunidad Valenciana.

Más allá de estar considerado lícito o no es una práctica que está de moda precisamente por las cuantiosas sumas de dinero que le repercute a las empresas a base de un poder que nosotros les hemos otorgado. Unas personas corrientes que al estar en un cargo de poder se abastecen de contáctos que a la larga les reportan un rédito que engorda sus cuentas corrientes. ¿Podría a parte de ser ilícito ser competencia desleal a otra empresa de la competencia que no tiene a un ex-algo de relaciones institucionales?

Mención a parte merece el tema de los Borguiones o Gorbones. Los infantes consortes tienen la mísma práctica que los ex-algo con el mísmo grado de ilicitud que los anteriores pero éstos con el agravante de no haber sido elegidos por sufragio universal en la vida pública sino por sufragio genital, lo que es lo mísmo un braguetazo. Las infantas reales estan en la misma situación nada más que su preparación se basa en la designación divina innata así como la experiencia profesional se basa en saludar, sonreir, navegar y la memorización de la fórmula: "Declaro inaugurado + evento||construcción".

¡Qué rentable es eso de dedicarte a solucionar los problemas de los ciudadanos porque los tuyos sean poner ceros a la derecha en la cartilla del banco!

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